Muchos cristianos tienen dudas sobre el tema de tomar o no tomar alcohol. Es confuso llegar a la respuesta correcta cuando en la biblia no hay suficientes referencias sobre el acto de consumir bebidas alcohólicas. Sin embargo, algunos pasajes nos relatan historias en donde el vino está presente, por lo que te ayudaremos a analizar cuál fue el proceder de los personajes involucrados en dichos relatos, para que así puedas tener una idea más clara de la posición que deberías adoptar con respecto al alcohol.
Algunas denominaciones cristianas no aprueban el consumo de alcohol
Existe cierto debate sobre los cristianos y la bebida; algunos dicen que es algo cultural y que la Biblia no lo prohíbe explícitamente. Mientras que otros afirman que no debe permitirse, porque la palabra de Dios habla del vino, no de otras bebidas como la cerveza, el ron, el whisky, el champán, etc.
Asimismo, la Biblia no prohíbe a los cristianos beber cerveza, vino o cualquier otra bebida alcohólica. El alcohol en sí no está contaminado por el pecado. En cambio, los cristianos deben abstenerse absolutamente del alcohol y el alcoholismo (Efesios 5:18; 1 Corintios 6:12).
Hay algunas referencias al vino en la Biblia, pero no se refieren específicamente al alcohol
Primero debemos recordar que la Biblia solo menciona el vino, porque era la bebida alcohólica más popular de la época, por lo tanto, es comprensible que solo se mencione esta bebida. Esto significa, por ejemplo, que no podemos hacer valer nuestro derecho a emborracharnos con cerveza, porque no tiene base bíblica.
Las referencias a la bebida en el Antiguo Testamento son variadas, incluidas las advertencias. Por ejemplo, en Proverbios 20:1 leemos que “el vino hace al hombre, la bebida fuerte alborota, y el borracho es necio” (Proverbios 20:1).
La Biblia no menciona directamente el consumo de alcohol
Por otro lado, aunque Efesios 5:18 nos advierte que no nos emborrachemos, el pasaje en realidad no nos prohíbe beber, nos prohíbe emborracharnos. La escritura dice: “No os embriaguéis con vino, que lleva al libertinaje, sino sed llenos del Espíritu Santo.”
No hay prohibición de no beber alcohol. Además, sabemos que Pablo le recomendó vino a Timoteo por sus propiedades medicinales (1 Timoteo 5:23). Volvamos a las palabras de Pablo. El primer ejemplo que da, en 14.2, no tiene nada que ver con beber alcohol sino con comer carne. Un ejemplo de una persona débil es un vegetariano. ¿Significa eso que si tenemos hermanos vegetarianos en una de nuestras iglesias, no debemos comer carne?
¿Qué pasa si alguien piensa que no debemos comer carne o verduras? ¿Qué hará la iglesia? ¿La iglesia siempre toma en cuenta la opinión de los más débiles de la congregación en todo lo que hace? Creo que obviamente ninguna iglesia llegaría a ese extremo.